Del pasado, sobre todo si es reciente, se puede aprender lo que puede ocurrir en el futuro. He decidido colgar varios vídeos con documentales sobre procesos independentistas de varios países: Escocia, Kosovo, Yugoslavia, Argelia y Ucrania.
Escocia
El referéndum para decidir si Escocia debería ser un país independiente El referéndum para decidir si Escocia debería ser un país independiente tuvo lugar el 18 de septiembre de 2014. Fue convocado a raíz de un acuerdo entre los gobiernos escocés y del Reino Unido, por el que se establecieron las bases para un referéndum sobre la independencia escocesa. Finalmente, el «No» a la independencia se impuso con el 55,3 % de los votos, frente al 44,7 % de los partidarios por la secesión. Hubo una participación de 84,6 %, inusualmente alta para una consulta en Escocia.
El ex president de la Generalitat Artur Mas dijo que el modelo ideal a seguir era Escocia y no Kosovo. Hay un problema: el gobierno catalán jamás podrá celebrar un referéndum consensuado con el gobierno español. La mayoría de los españoles votan partidos políticos (PP, C's, PSOE) que niegan el derecho a decidir al pueblo catalán UNIDOS PODEMOS aunque manifiesta que está a favor del derecho a decidir, no tiene peso político suficiente para permitir un referéndum. La única opción que tiene el gobierno catalán es organizar una RUI (Referéndum Unilateral de Independencia) lo que desataría la represión del estado español que trataría de impedir que ese referéndum y detener a los organizadores de dicha consulta democrática. El escenario escocés es casi imposible que se reproduzca en Catalunya. Sin embargo, veo muchas similitudes entre los independentistas catalanes y escoceses, tanto en su objetivo de independizar sus naciones como en sus métodos pacíficos y democráticos para conseguirlo.
La India
La leyenda de que el movimiento de Independencia de La India practicó la no violencia y la desobediencia civil como únicos métodos de lucha contra la corona británica no son ciertas. La revolución de India y su independencia no fueron pacíficas. Detrás de Gandhi y su movimiento de desobediencia civil, se encontraron las diferentes guerras de guerrillas, las manifestaciones violentas de los trabajadores en huelga, la guerra del norte de Bose (el gran olvidado, por cierto, en el mito ideal del pacifismo gandhiano occidental), la ayuda del ejército japonés y la Segunda Guerra Mundial, que provocaron que Gran Bretaña se viera en grave peligro económico, político y militar, y tuviera que ceder al gobierno hindú.
Las ideas y estrategias de Gandhi en relación a la desobediencia civil no eran bienvenidas al principio entre los políticos, por considerarlas imprácticas. Gandhi era de la creencia que la desobediencia civil era el arma más efectiva para repeler leyes amorales e injustas, pero para lograrlo era necesario recurrir a manifestaciones no violentas y retirar toda cooperación con un estado corrupto. Esta estrategia llamada "satyagraha" inspiró a millones de hindúes cuando fue utilizada después de la masacre de Amritsar. Durante su primera "satyagraha" a nivel nacional, Gandhi abogó por boicotear las instituciones educacionales británicas, las cortes y los productos; también renunciar a cualquier cargo en el gobierno colonial; negarse a pagar impuestos y desconocer cualquier título británico.
El dirigente de ERC Joan Tardà apuesta por escenarios gandhianos en Catalunya para lograr la independencia y advierte que "habrá que jugar al gato y al ratón durante unos meses". El Estado Mayor del Ejército de España está dirigido por generales que tienen una idea de España similar a la del dictador Francisco Franco y para ellos los independentistas son unos traidores con mayúsculas y la independencia una locura que debe ser impedida a toda costa. Yo no descarto la declaración del estado de excepción o un golpe de estado estilo 23F en España, la suspensión de la autonomía catalana, la invasión militar española de Catalunya y la represión de los independentistas.
Los independentistas catalanes no se parecen mucho que digamos a Ghandi y sus seguidores, entre otras cosas porque la sociedad hindú no tiene mucho que ver con la sociedad catalana. En la India hay una sociedad de castas, un montón de religiones, creencias y costumbres extrañas para un hombre de Europa occidental. Ghandi era un hombre singular que igual acudía a rezar a un templo de religión hindú, una iglesia católica a una mezquita. En una sociedad como la catalana, donde la gente es laica o católica en su mayoría, imitar a Ghandi y sus métodos de lucha sin entender su mentalidad, sería un despropósito que acabaría en un pacifismo de acampada de tiendas de campaña estilo 15M que no conduce a ninguna parte.
A pesar de todo, aprecio algunas coincidencias: la determinación de querer lograr la independencia pero es una determinación que ha nacido hace poco tiempo y necesita fortalecerse todavía más para emprender un auténtico desafío soberanista que deje atrás las manifestaciones festivas, borradores de planes, declaraciones de intenciones, conferencias y pequeños actos reinvidicativos.
Kosovo Los independentistas catalanes no se parecen mucho que digamos a Ghandi y sus seguidores, entre otras cosas porque la sociedad hindú no tiene mucho que ver con la sociedad catalana. En la India hay una sociedad de castas, un montón de religiones, creencias y costumbres extrañas para un hombre de Europa occidental. Ghandi era un hombre singular que igual acudía a rezar a un templo de religión hindú, una iglesia católica a una mezquita. En una sociedad como la catalana, donde la gente es laica o católica en su mayoría, imitar a Ghandi y sus métodos de lucha sin entender su mentalidad, sería un despropósito que acabaría en un pacifismo de acampada de tiendas de campaña estilo 15M que no conduce a ninguna parte.
A pesar de todo, aprecio algunas coincidencias: la determinación de querer lograr la independencia pero es una determinación que ha nacido hace poco tiempo y necesita fortalecerse todavía más para emprender un auténtico desafío soberanista que deje atrás las manifestaciones festivas, borradores de planes, declaraciones de intenciones, conferencias y pequeños actos reinvidicativos.
Kosovo tiene una superficie de 10 887 km² y está habitado por cerca de 1,8 millones de personas. El Reconocimiento internacional de la independencia de Kosovo es motivo de duda. El gobierno de Kosovo, en cuyo territorio la etnia albanesa tiene predominio numérico, declaró unilateralmente su independencia de Serbia el 17 de febrero de 2008 con el apoyo de Estados Unidos y la mayoría de los países que integran la Unión Europea, instaurando la República de Kosovo. Por su parte, Serbia aún considera a Kosovo una provincia autónoma dentro de su propio territorio. Actualmente Kosovo es reconocido como Estado soberano por 111 de los 193 miembros de Naciones Unidas. Serbia, Rusia, España y otros países no aceptaron este hecho unilateral ni reconocen a la República de Kosovo como Estado soberano. Tras seis meses de negociaciones auspiciadas por la Unión Europea, el 19 de abril de 2013 los gobiernos de Serbia y la República de Kosovo alcanzaron un acuerdo para el establecimiento de relaciones bilaterales. La guerra de Kosovo provocó que centenares de miles de refugiados tuviesen que abandonar sus hogares. Una investigación apunta a que murieron 12.000 personas durante esta guerra.
El president de la Generalitat Puigdemont preguntó a Albiol (PP): "¿Sabe a quién recibió hace una semana el señor Juncker? Al primer ministro de Kosovo ¿Sabe por qué es primer ministro el señor Mustafá? Después de una declaración unilateral de independencia".
Los casos de Catalunya y Kosovo no comparten muchas similitudes. Los conflictos y guerras en Europa del Este suelen tener un origen étnico. El conflicto de Catalunya no es entre catalanes de pura cepa y descendientes de españoles o españoles de otras comunidades autónomas, sino entre independentistas y unionistas, aunque más bien es un conflicto entre una mayoría independentista y a favor del derecho a decidir por un lado y el estado español por el otro. El unionismo activo en Catalunya no se caracteriza por hacer manifestaciones masivas ni por la juventud de sus integrantes.
Yugoslavia
Las Guerras de Yugoslavia fueron una serie de conflictos en el territorio de la antigua Yugoslavia, que se sucedieron entre 1991 y 1999 aunque con conflictos menores hasta 2001. Las guerras se caracterizaron por los conflictos étnicos entre los pueblos de la ex Yugoslavia, principalmente entre los serbios por un lado y los croatas, bosnios y albaneses por el otro; aunque también en un principio entre bosnios y croatas en Bosnia-Herzegovina. El conflicto obedeció a causas políticas, económicas y culturales, así como a la tensión religiosa y étnica. Hubo muchos detonantes, pero los principales fueron la abolición de la autonomía de Kosovo por Milosevic, y sobre todo que los serbios de la región croata de la Krajina declararan su separación de Croacia en marzo de 1991, lo que llevó a Croacia y a Eslovenia declarar unilateralmente su independencia y producir un efecto contagio en el resto de repúblicas yugoslavas. Debido al choque entre el nacionalismo serbio (Milosevic) y el croata (Tudjman) se degeneró en una guerra muy violenta. Meses después el 15 de enero de 1992 los países europeos de la CE y la comunidad internacional reconocen la independencia de Eslovenia y Croacia, provocando el fin de Yugoslavia, aunque Serbia y Montenegro seguirán usando esta denominación (sin reconocimiento internacional) hasta el 2003.
El cantante Loquillo llegó a decir lo siguiente: "La situación que se vive en Cataluña es muy grave, pero los medios de comunicación no lo dicen. Es muy parecido a lo que había en Yugoslavia hace 10 años." No estoy para nada de acuerdo. Los conflictos y secesiones en la Europa del Este tienen un marcado caracter étnico, el resto es secundario. El independentismo catalán es democrático, participativo, pacífico y nada excluyente. Por el contrario, el régimen español si recuerda en el modo de obrar a la política totalitaria de Milosevic como la polémica "abolición de la autonomía de Kosovo". ¿Cuántas veces hemos escuchado al gobierno español y dirigentes políticos españoles mencionar el artículo 155 de su Constitución y apoyar la "suspensión de la autonomía catalana?
Guerra de Independencia de Argelia tuvo lugar entre 1954 y 1962 y fue un periodo de lucha del Frente Nacional de Liberación de Argelia (FLN), que luchaba contra la colonización francesa establecida en el país desde 1830. La Guerra de Independencia de Argelia (1954-62), brutal y larga, fue el punto de giro más reciente en la historia del país. Aunque el FLN también luchó con las armas contra otras corrientes independentistas, a la larga unió a los argelinos y abrasó el valor de la independencia y la filosofía del anticolonialismo en la conciencia nacional. El uso sistemático de la tortura por parte de los franceses no aseguró la victoria militar. La guerra terminó con el reconocimiento por Francia, a través de los acuerdos de Evian de la independencia de Argelia el 5 de julio de 1962. Significó la expulsión de alrededor de un millón de colonos europeos originarios de Francia, Italia o España, así como miembros de minorías religiosas, como los judíos.
El independentismo catalán y argelino no tiene mucho que ver. El independentismo catalán ni discrimina a sus ciudadanos por su raza, etnia, religión, etc ni pretende su expulsión. Todo lo contrario, no duda en admitirlos en su seno. Si el proceso soberanista catalán sigue su curso, el estado español entrará en un estado de psicosis represiva y se comportará igual que el estado francés hizo durante la guerra de Independencia de Argelia. En caso de represión, los independentistas catalanes obrarían igual que los independentistas argelinos, abrazarían la causa independentista con más fuerza y aumentaría la conciencia nacional y el rechazo al régimen español y todo lo que representa. El independentismo catalán es como una hidra, si el estado español decide cortar varias cabezas, aparecen más.
La Guerra en el este de Ucrania, denominada también Guerra del Donbáss una serie de enfrentamientos armados sucedidos en las regiones del este de dicho país a partir del 12 de abril de 2014, como reacción contraria al Euromaidán, y que se produjeron tras las protestas prorrusas en este país y la declaración de independencia de Donetsk y Lugansk. El Euromaidan es el nombre dado a una serie de manifestaciones y disturbios heterogéneos de índole europeísta y nacionalista en Ucrania que en su clímax derrocaron al presidente electo Víktor Yanukóvich del prorruso Partido de las Regiones. Estas comenzaron en Kiev la noche del 21 de noviembre de 2013. El día anterior, el 20 de noviembre, el Gobierno de Ucrania había suspendido la firma del Acuerdo de Asociación y el Acuerdo de Libre Comercio con la Unión Europea (UE) Desde principios de marzo de 2014, se realizaron manifestaciones prorrusas y de grupos contrarios al nuevo gobierno establecido en Kiev tras el Euromaidán en las provincias de Donetsk y Lugansk, territorios llamados en su conjunto Donbass. Estas manifestaciones se intensificaron tras la anexión de Crimea y Sebastopol a la Federación rusa, donde también se habían realizado movimientos similares. La escalada del conflicto desembocó en un conflicto armado entre las fuerzas independentistas de las auto proclamadas Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk y el gobierno de Ucrania.
El caso de Ucrania es otro conflicto de carácter étnico. Una minoría de origen ruso y favorable al régimen ruso, decide declarar la independencia de sus territorios después de que los nacionalistas ucranianos tomasen el control del parlamento de Ucrania y del gobierno instigados por potencias occidentales contrarias a Rusia.
La única coincidencia entre la minoria prorrusa independentista de Ucrania y los independentistas catalanes nuevos y de toda la vida es la adversión hacia la política sus gobiernos centrales respectivos. Por eso, tanto unos como otros, han decidido separar sus territorios para formar unas repúblicas que velen por los intereses de sus ciudadanos.
El independentismo de Catalunya se parece más al independentismo de Escocia que al independentismo de La India, Kosovo, Argelia, Donetsk, Lugansk o el secesionismo de algunas repúblicas de la antigua Yugoslavia. Excluyendo cualquier posibilidad de un conflicto étnico violento, Catalunya puede acabar como Kosovo, La India, Argelia, Donetsk y Lugansk y la culpa no será de la mayoría de los catalanes...